[youtube https://www.youtube.com/watch?v=IbLoziQLK2k&w=640&h=360]
En su ponencia Patrimonio. La otra mirada, el museólogo y profesor de Historia de la Facultad Experimental de Arte de la Universidad del Zulia, Jimmy Yánez explicó que al hablar en Venezuela sobre los conceptos de patrimonio, identidad, cultura y tradición surgen una serie de interrogantes que, al tratar de responderlas, revelan una realidad cultural crítica y diversa. Esta conferencia fue parte del seminario “Visiones contemporáneas sobre patrimonio cultural”, realizado en Maracaibo, Venezuela, los días 22 y 23 de octubre de 2015.
El valor de la inmediatez es una característica en el país, así, “una mirada a nuestro alrededor corrobora que todo lo que poseemos, sentimos y escuchamos es parte de la cultura del aquí y el ahora”, esto hace que, “lo contemporáneo, con su gran carga de postmodernidad, nos ahogue”. Aseveró que el “use y bote” pareciera ser el lema del tiempo actual, ante lo cual todo aquello que represente el pasado -cercano o remoto- pudiese ser eliminado; en este sentido señaló que la cultura no escapa de este drama.
Yánez explicó como en el proceso de querer colocarse a la altura de las grandes culturas del mundo occidental moderno, en Venezuela se han destruido o sustituido elementos del pasado que forman parte de su historia y su memoria, mientras se aceptaban como válidos y se asumían aquellos provenientes de culturas ajenas. Por lo tanto, en el país, puntualizó, no se tiene plena conciencia de la propia cultura, con el peligro de convertirse en presa fácil de cualquier intensión política, económica o social. “Tomar conciencia del carácter histórico es identificar y valorar lo nuestro, cuando el individuo se debate en función de su yo, rompe las cadenas interiores y encuentra el camino de su cultura. No se puede ser libre sin conocer la cultura propia. La libertad es un estado de conciencia donde el hombre es dueño de sí mismo, sabedor de lo que es y esto solo lo consigue por el camino de su propia cultura. La verdadera libertad es orden y por tanto armonía con la cultura”.
Así, el reconocimiento del bien patrimonial lleva hacia la toma de conciencia de lo histórico. En este sentido reflexionó sobre los siguientes cuestionamientos: ¿Socialmente, los venezolanos han desarrollado una conciencia histórica? ¿Cómo el sistema educativo ha colaborado en la formación de esa conciencia histórica? ¿Cómo afectó el cambio de una Venezuela rural a una urbana? ¿Cómo se absorbieron los elementos de culturas ajenas en la propia? Un recorrido histórico por el desarrollo de la cultura nacional evidencia el proceso de mestizaje ocurrido en el país, que lo llevó a concluir: “hoy somos el producto de una mezcla del español con el indio y luego el negro africano. Lo ´nuestro´ se ha deformado por la manera de trasmitirse de generación en generación, cuyo comienzo data del siglo XVI y hoy no cesa”.
No se logra identidad si se desconoce la verdad de los orígenes, continúa Yánez, y entonces ¿Cómo valorar y resguardar lo que no se conoce y que además se considera inútil en la sociedad actual? A lo cual respondió con una frase del historiador inglés Edward H. Carr: “El pasado nos resulta inteligible a la luz del presente y solo podemos comprender plenamente el presente a la luz del pasado”; por lo tanto, hacer que el hombre conozca el pasado es la función de la historia. Los museos, propuso Yánez, permiten precisamente el rescate de la cultura; como ejemplo citó el caso de las experiencias en los museos instrumentales que ofrecen actividades de exploración para los niños, brindando apoyo a las actividades escolares en el conocimiento de la propia historia.
Otra interrogante planteada por el ponente fue sobre qué se debería dejar como herencia, porque evidentemente no todo se
constituye en patrimonio. Esta elección depende de la significación social que cada nueva generación le otorgue al pasado, según su carga histórica, explicó Yánez. Y, en este sentido, estableció como el comportamiento de los grupos sociales con respecto a su historia es variante; existiendo una evidente diferencia entre lo valorado por la cultura oficial y aquello que es significativo para la cultura popular. Según su parecer, “no se trata de suplantar lo viejo por lo nuevo, la tradición no puede verse como algo ajeno o alejado de la cultura de nuestros pueblos. Los valores formados por nuestros antepasados, la tradición, nos ayudan a crecer. Las tradiciones son parte de nuestra experiencia, construyen las historias regionales que nos preparan para las historias nacionales; son inclusivas y nos dan elementos para analizar lo actual”.
Por lo tanto, afirmó Yánez, en Venezuela no existe un patrimonio, sino que se puede hablar de muchos, acordes a las identidades locales. De esta forma apela al concepto de espacio “geomental”, propuesto por el filósofo tachirense José Pascual Mora, quien afirma que “el espacio geomental designa un sector de la búsqueda histórica que apunta a reconstruir la concepción del mundo y la sensibilidad colectiva propia de una cultura, propias a un momento dado. Aquí, la comprensión del concepto es vasto. Él designa no solamente las estructuras cognitivas sino también los hábitos psicológicos y morales, las esencias profundas, la visión del mundo, así como el dominio afectivo”.
Con el apoyo a los procesos resultantes de la interculturalidad, concluyó Yánez su intervención, la cual concibe como la coexistencia, el encontrarse, comprenderse, el construir puentes entre las culturas. En este sentido, señaló como Latinoamérica puede ser un laboratorio para “construir esos puentes”, debido a su riqueza cultural; así, “la otra mirada” refiere al contacto entre los saberes de distintas culturas, de los valores transculturales que ofrecen las diferentes comunidades; un abrir los ojos hacia el presente, en el ahora y hacia un futuro de paz, justicia y solidaridad.
Notas relacionadas
Resumen del seminario: El patrimonio cultural zuliano genera discusión e interés.
Programa del Seminario “Visiones contemporáneas sobre patrimonio cultural”, realizado en el Maczul, Maracaibo, Venezuela, los días 22 y 23 de octubre de 2015.
Be the first to comment