La casa de José María España suma 21 años de abandono

La casa de José María España, prócer de la gesta independentista, tiene 21 años de abandono. Tras todo tipo de vicisitudes y falsas promesas, hoy es un inmueble colonial en ruinas invadido por una familia desde 2014. Guaireños reclaman su restauración.

Nadeska Noriega Ávila. @nadeska16. 7/9/2018.

La Guaira, Vargas. Al caminar por la estrecha calle San Francisco en pleno corazón del casco histórico de La Guaira (capital del estado Vargas, en la costa norte de Venezuela), una casa con fachada deteriorada y ventanales derruidos luce, desde 1997, una placa de mármol, que da fe de su histórico abolengo.

Aunque no lo parezca, la casona colonial, que hoy permanece invadida, fue la vivienda principal del prócer guaireño José María España, conocido como el «Primer mártir de la libertad de Venezuela», y de su esposa Joaquina Sánchez. Ambos, junto con Manuel Gual, protagonizaron el primer movimiento independentista de América. La gesta, conocida bajo la denominación histórica de la Conspiración de Gual y España, la cual fue desvelada el 13 de julio de 1797, acarreó la persecución, tortura y asesinato de sus protagonistas.

“La placa fue colocada al conmemorarse el bicentenario de la Conspiración de Gual y España. En esa oportunidad el gobierno del entonces presidente Rafael Caldera y el Congreso Nacional acordaron hacer actividades para enaltecer el movimiento emancipador y las figuras de Gual y España, así como la esposa de este último, Joaquina Sánchez. En el marco de estas actividades se designó una comisión integrada por varguenses, para organizar una serie de eventos y actos protocolares.

21 años sin planes de recuperación

“En esa época se construyó la plaza que está ubicada en la «esquina caliente» de La Guaira y se aprobó asumir como bandera del municipio Vargas la diseñada por Gual y España para la Venezuela liberada”, rememora el historiador Rubén Contreras Guzmán, presidente de la Sociedad Bolivariana de La Guaira. Este, junto con otros ilustres guaireños, formó parte de la referida comisión bicentenaria.

Contreras recuerda que entonces la casa era ocupada por una familia que aseguraba ser propietaria del inmueble. Se entablaron negociaciones con la misma para establecer la propiedad real. “En ese momento permitieron que se colocara la placa. Tuvimos acceso al interior de la casa y se planteó la posibilidad de instalar allí un museo, en donde se rindiera tributo a este movimiento independentista y adelantado a su época”.

Explica el historiador que Gual y España fueron permeados por textos de la Revolución Francesa y sus principios hablaban de una sociedad de iguales, lo que era un pensamiento inmensamente progresista a finales del siglo XVIII. “Mostrar eso y rendir un tributo a su memoria pasa innegablemente por recuperar su casa, lo que le daría una gran prestancia al casco histórico, un foco de desarrollo cultural y turístico, pero lamentablemente no fue así”, agrega Contreras Guzmán.

Tras 21 años de esa promesa, la casa natal de José María España ha enfrentado diversas situaciones. Inundada por la tragedia de 1999, rescatada por los vecinos, invadida numerosas veces, intervenida para salvarla de filtraciones, fue finalmente comprada en 2009 por el Ministerio del Poder Popular Para el Turismo, con el objeto de darle un uso acorde con el área, pero tampoco sucedió.

Sin un plan concreto de recuperación, la casona histórica está a la deriva, como una asignatura pendiente y una herida al patrimonio cultural guaireño.

Naturaleza, trabas legales e indiferencia

Múltiples razones han abonado el camino para que la casa natal de José María Vargas permanezca en el abandono, entre ellas la propia naturaleza, trabas legales y mucha indiferencia.

“En 1997 la alcaldía de Vargas, bajo el mandato del entonces alcalde Lenin Marcano, se comprometió a expropiar la vivienda y entregarla a la Fundación Gual y España, que presidía en ese momento Pompeyo Márquez. Esa fundación tenía como objeto el desarrollo de un museo, en donde se puedan mostrar los documentos del Archivo de Indias, que dan fe de la carga humana y social de la gesta de Gual y España” explica el exdiputado del Congreso Nacional, Pedro Castillo, quien presidió el capítulo varguense de dicha fundación.

De acuerdo a Castillo, una de las trabas legales fue la determinación de la propiedad del inmueble, del cual solo se conocía un título supletorio a nombre de una empresa perteneciente a Julio Quintero y Hugo Ancieta.

Finalmente el 30 de octubre de 1998, según los archivos municipales, el alcalde Lenín Marcano emitió un decreto de expropiación para “convertir a la Casa Natal de José María España, ubicada en la calle San Francisco de La Guaira, en el Museo de la Memoria del Movimiento de Gual y España”.

“Tras el decreto comenzó una lucha legal en tribunales, en cuanto al pago de la expropiación. Eran otros tiempos y se respetaba el Estado de Derecho. Eso retraso todo el proceso”, acota Castillo.

En 1999 la casa fue seriamente afectada por la crecida del río Osorio durante la llamada Tragedia de Vargas.

De recinto de un prócer a depósito de trastos

En el año 2000 inició el proceso de despeje del casco histórico de La Guaira y entre las casas atendidas se ubicó la de José María España. Las placas colocadas en su fachada, una por la Comisión Bicentenaria en 1997 y otra en la década de los 80, cuando las Sociedades Benéficas de La Guaira rindieron tributo a España, designándolo Hijo Ilustre, seguían allí, recordando la deuda gubernamental con la estructura.

Entre 2001 y 2004 la casona fue limpiada, reparadas las filtraciones y se hicieron tratamiento a los árboles que crecen en su patio trasero, que da a las riberas del río Osorio. En ese mismo lapso fue invadida y desalojada en dos ocasiones. En 2005, el gobierno municipal del alcalde Alexis Toledo permitió que una cuadrilla de limpieza, encargada de las pintas políticas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en La Guaira, utilizara el histórico inmueble para guardar sus herramientas.

El tema de la casa de España fue relegado, la edificación nuevamente invadida y su destino final seguía siendo una gran incógnita.

Reivindicar al «primer revolucionario»

En el año 2008, con el triunfo del primer periodo como gobernador de Jorge Luís García Carneiro, el nombre de José María España fue desempolvado. Para reivindicar la memoria del prócer guaireño, García Carneiro propuso hacer un referendo para cambiar el nombre al estado Vargas por el de estado José María España o España. La propuesta incluía el rescate y acondicionamiento de la casona de la calle San Francisco.

En ese momento, García Carneiro expuso la necesidad “de rescatar al primer revolucionario de la historia de Venezuela”.

“Desde ese momento inició una ola de bautizos con el nombre de Gual, España y Joaquina Sánchez. Instituciones, consejos comunales, plantas termoeléctricas, comunidades, avenidas, proyectos y promociones escolares. Sin embargo, la casa de la calle San Francisco, la que le sirvió de escondite mientras los perseguían los españoles, permaneció abandonada” refiere el investigador local Federico Ortega.

Tras los anuncios del gobernador Jorge García Carneiro, titulares de los Ministerios para la Mujer y de Turismo mostraron su interés por la vetusta casona. Finalmente, tras fallos desfavorables al proceso de expropiación iniciado por el municipio, fue el Ministerio de Turismo quien compró la vivienda, negoció con el grupo familiar que la invadía y la cerró.

Proyectos infructuosos y nueva invasión

Con el rechazo general a la idea de cambiar el nombre del estado, el rescate de la casa de España fue nuevamente desechado. En el año 2010 voceros del consejo comunal “Casco Central” de La Guaira acudieron al ente ministerial con un proyecto: instalar en la casa a una Organización No Gubernamental que defendiera los derechos de la mujer, en honor a Joaquina Sánchez, esposa de España

“Propusimos que el inmueble pasara a manos de organizaciones comunales para ayudar en la recuperación y  darle un uso comunitario al inmueble, claro está con el apoyo y supervisión de los entes gubernamentales. La casa estaba cerrada y vacía y sabíamos que si no le dábamos uso iba a ser nuevamente invadida. Pensamos que sería un lugar ideal para dar atención a mujeres y también para dictar talleres de formación para los habitantes de la comunidad”, cuenta Xiomara Brito, vocera del referido consejo comunal. Brito lamenta que el Ministerio de Turismo no diera respuesta a la solicitud comunitaria.

Finalmente en el año 2014, el entonces titular de la cartera de turismo, Andrés Izarra, suscribió un comodato por 15 años por el que se entregaba formalmente la casa a la Alcaldía de Vargas, conducida en ese momento por el alcalde Carlos Alcalá Cordones.

La administración de Alcalá Cordones ofreció la casa para que fuera sede de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA) y de la Zona de Defensa Integral de Vargas (Zodi Vargas), a cambio de que fuese recuperada. Ambos entes rechazaron la oferta. La casa fue nuevamente invadida en 2015, por la familia que la ocupa actualmente.

Guaireños esperan acciones

Con la llegada reciente de José Alejandro Terán a la alcaldía de Vargas y la instalación de un Consejo Municipal de Patrimonio, el rescate de la casa de José María España ha vuelto nuevamente a la palestra.

“Dentro de los objetivos de esta gestión está el enaltecer el nombre de España, promover el estudio de su vida en los centros educativos y saldar esa deuda que se mantiene con la casa de España. Se está trabajando en un proyecto que será presentado antes de que concluya este año”, asegura Jesús Cumare, cronista oficial de la ciudad de La Guaira.

En cuanto a la consecución de recursos para su recuperación, muchos lugareños son escépticos. “Tristemente la casa de España sirve solo para campaña o cuando quieren celebrar la fiesta y vuelven a decir sin ningún pudor que la van a recuperar. No lo hicieron cuando teníamos dinero, dudo que ahora la hagan cuando todo es la crisis económica” comenta el vecino José Rivas desde la esquina caliente de La Guaira.

“Los varguenses debemos exigir un homenaje efectivo para Gual, para España y para su esposa Joaquina. Exigir al Ministerio de Turismo y a la Alcaldía de Vargas que le expliquen a los vecinos y al colectivo qué se piensa hacer con el inmueble. Es nuestro patrimonio y debemos recuperarlo” reitera Federico Ortega.

La placa del bicentenario de la Conspiración de Gual y España sigue en la fachada de la casa, como un recordatorio constante, un llamado a la empatía y la conciencia para que, finalmente, la casa natal de José María España sea visitada por quienes quieran conocerla, como patrimonio cultural de los venezolanos que es.

Bien de interés cultural en peligro

La casa de España es una estructura colonial de una planta y fachada de composición simétrica con un portón y ventanales típicos de la colonia. El inmueble, que data del siglo XVIII, cuenta con la calificación de bien de interés cultural de la nación, al pertenecer a las estructuras registradas en el I censo de patrimonio cultural de Vargas, levantado entre los años 2004 y 2005.

Fuentes consultadas

Brito, Xiomara. Integrante de Consejo Comunal Casco Central de La Guaira. Entrevista realizada el 23 de agosto de 2018.

Castillo, Pedro. Exdiputado del Congreso Nacional por el estado Vargas. Entrevista realizada el 17 de agosto de 2018.

Contreras Guzmán, Rubén. Historiador. Presidente de la Sociedad Bolivariana de La Guaira. Entrevista realizada el 21 de agosto de 2018.

Cumare, Jesús. Cronista de la Ciudad de La Guaira. Entrevista realizada el 22 de agosto de 2018.

Instituto de Patrimonio Cultural (IPC). Catálogo del patrimonio cultural venezolano. Tomo municipio Vargas / Estado Vargas. Año 2004 – 2005.

Ortega, Federico. Docente e investigador de historia en el estado Vargas. Entrevista realizada el 25 de agosto de 2018.

Rivas, José. Vecino del casco histórico de La Guaira. Entrevista realizada el 23 de agosto de 2018.

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