«La Nacionalidad», anclado en la sierra nevada de Mérida, es el monumento a mayor altura del mundo consagrado al Generalísimo Francisco de Miranda. Con esta obra también se tributa a los símbolos patrios de Venezuela.
Nombre: Monumento a La Nacionalidad / Monumento a los Símbolos Patrios / Monumento a Francisco de Miranda.
Año: 11 de marzo de 1984.
Autor: Manuel de la Fuente Muñoz (1932 – 2010).
Fundición: Martín González Vides.
Promotor: Club Andino Venezolano / Concejo Municipal de Libertador / Sistema Teleférico de Mérida.
Tipo de patrimonio cultural: Tangible / Mueble.
Administrador custodio o responsable: alcaldía del municipio Libertador / Instituto Nacional de Parques (Inparques).
Historia
Descripción
Valores patrimoniales
Situación actual
Ubicación
Fuentes consultadas
Historia
Un monumento a Miranda y a los símbolos patrios
En vísperas de la conmemoración del centenario del natalicio del Padre de la Patria, el 31 de enero de 1982, el presidente del Concejo Municipal de Libertador, doctor Jesús Rondón Nucete, ascendió a la cima del espolón denominado “El Dedo de Dios” de la Sierra Nevada de Mérida, a unos 4800 m s. n. m. Cumplía con ello los deseos del andinista Rafael Muñoz Tébar y del Club Andino Venezolano de erigir en la cima de Venezuela un homenaje a Sebastián Francisco de Miranda (1750 – 1816). No fue solo. Lo acompañaban el historiador Carlos Chalbaud Zerpa, el gerente del Teleférico de Mérida, Nemesio Andrade Delgado, y de los guías Carlos Reyes y Jaime Bautista. La filosa cumbre la bautizó con el nombre de “Miranda”, y dispuso erigir un monumento a su memoria y al tricolor nacional.
La propuesta fue dada a conocer a los merideños por Carlos Chalbaud Zerpa en un artículo publicado en el diario Frontera el 11 de febrero de 1982. En el escrito, el cronista de la Sierra Nevada informaba que el monumento consistía en un busto de bronce del héroe caraqueño, al cual se le anexaría un asta donde flamearía permanentemente el tricolor patrio. El monumento llevaría además “una placa de bronce, clavada en la roca, con el emblema de la república y la primera estrofa del Himno Nacional”. Dicho proyecto estaba previsto ser inaugurado el 12 de marzo de 1982, durante la celebración del entonces Día de la Bandera, fecha en la que se rememoraba la izada por primera vez del pabellón nacional ondeado por Miranda en 1806 en el puerto de Jacmel (Haití).
Para concretar lo planteado, el ayuntamiento solicitó la realización de la escultura de Miranda al artista gaditano Manuel de la Fuente Muñoz (1932 – 2010), quien la hizo gratuitamente. El escultor siguió el boceto que había diseñado en años anteriores para una estatua del prócer que se pensaba colocar en la Vela de Coro, pero que al final no se ejecutó, la cual estaba valorada en 40 000 bolívares. Es decir, ya no sería un busto según lo indicado por Chalbaud Zerpa, sino una estatua pedestre de tamaño heroico que sostendría en la mano derecha la bandera nacional y, en la izquierda, una espada. La fundición fue encargada al maestro Martín González Vides en su taller localizado en Valle Grande, mientras que las placas fueron encomendadas al señor Paco Helí Contreras, quien las fundió en su taller en Santiago de la Punta.
Apoteósica hazaña
Difícilmente la obra pudo estar culminada para la fecha señalada por Chalbaud Zerpa. Según fue notificado en el diario El Vigilante el 25 de noviembre de 1982, la escultura ya había sido fundida. La misma se había dividido en cuatro partes para facilitar su traslado a la Sierra Nevada, lugar donde sería inaugurada el 12 de marzo del año siguiente. Sin embargo, no fue así. Tres meses después se dijo que el monumento se desvelaría durante la efeméride patria del 19 de Abril, fecha en la que tampoco pudo ser inaugurada la obra, ya que no se había podido trasladar la escultura.
Al parecer, las condiciones climáticas obstaculizaban la riesgosa tarea de trasladar la obra broncínea de 300 kilogramos de peso y de 2.70 metros de alto. Esta, una vez llevada en los vagones de carga por el sistema del Teleférico hasta la estación Pico Espejo, debía ser movilizada en los hombros “hasta el espolón definitivo por una cuadrilla de empleados del mismo teleférico y un grupo de esforzados andinistas capitaneados por Carlos Reyes”. Entre estos se encontraban: Eduardo Briceño, Pablo Avendaño, Felipe Sánchez, Teodoro Castillo, Eusebio Dugarte, Victorino Dugarte, Tiburcio Peña, Anastasio Peña, Jairo Burguera, Rafael Salas, Argenis Pietro, Nelson Rojas, Isidro Camacho, Nelson Rengifo, Ernesto Torres, Oswaldo Rodríguez, William Sarmiento, Pablo Sánchez, Miguel Moya, Jesús Faría, Freddy Peña, José Avendaño, Julio Muñoz, William Sánchez, Neudy Monsalve, Leo Jerez y Edgar Toro.
La formidable tarea se llevó a cabo a principios de julio de 1983. Pero la estatua no pudo afianzarse en el lugar, ni se ejecutaron los trabajos previstos motivados al mal tiempo imperante en la Sierra Nevada. Al respecto, Carlos Chalbaud Zerpa en su libro La Sierra Nevada de Mérida (1994) atestigua que continuamente se presentaba una “ventisca de hielo y granizo con temperaturas hasta 10 °C bajo cero que imposibilitaron por muchos días la preparación del cemento y que este pudiese fraguar, ya que los bidones con el agua llegaban congelados al sitio de su destino”. Este hecho, junto con las complicaciones para ascender al espolón, retardó la tarea. Finalmente la estatua estuvo en la cima el 11 de febrero de 1984.
En los más alto de Venezuela
La Nacionalidad fue solemnemente inaugurada el 11 de marzo de 1984, como parte de la conmemoración del Día Nacional de la Bandera, celebrado para entonces cada 12 de marzo. El acto realizado en la cumbre Miranda contó con la presencia de importantes personalidades de la entidad, como el presidente del cabildo merideño, doctor Jesús Rondón Nucete; el presidente de la Asamblea Legislativa del estado Mérida y su secretario, Orlando Gutiérrez e Iván Durán; el presbítero Eccio Rojo Paredes y una amplia representación del Club Andino Venezolano. En el evento Rondón Nucete y Chalbaud Zerpa desvelaron la estatua del general Francisco de Miranda, a lo que le siguió la entonación del Himno Nacional por la banda del Liceo Arzobispo Silva y la realización de la misa oficiada por el padre Eccio Rojo.
Una vez concluidos estos actos, el exrector de la Universidad de Los Andes, doctor Pedro Rincón Gutiérrez (1923 – 2004), pronunció el discurso de orden en la estación del Pico Espejo del teleférico. Allí se entregaron diplomas y medallas al Mérito Turístico a distintas personalidades vinculadas con el turismo y andinismo venezolano, entre ellas Carlos Chalbaud Zerpa, Bernardo Celis Parra, Giovanni Rizzi Marzona, Nemecio Andrade Delgado, Clemente Peña Sánchez, Carlos Reyes Corredor, José Benjamín Betancourt, Jaime S. Bautista R., y Eccio Rojo Paredes.
Descripción
El monumento a La Nacionalidad se encuentra en la cima del espolón Miranda a más de 4800 m s. n. m. en la Sierra Nevada de Mérida. Se compone de un pedestal de forma piramidal truncada de tres metros de alto aproximadamente, elaborado en piedras y lajas del mismo sitio, el cual está dividido en tres niveles. En el primero, ubicado en la parte inferior, se hallan adosadas dos placas de bronce, una de forma rectangular vertical (centro) en la que se reproduce el coro y la primera estrofa del canto patriótico “Gloria al Bravo Pueblo”, y la otra (izquierda), de forma rectangular horizontal, agregada en el año de 1992, alusiva a la XV Estación del Viacrucis de Mérida “La Resurrección”, efectuado en el marco de la celebración del quinto centenario del llamado Descubrimiento de América o Encuentro de Dos Mundos. En el segundo nivel se aprecia una placa de forma rectangular vertical (centro) con el Escudo Nacional.
En la cúspide del tercer y último nivel del pedestal, en posición hacia el oeste, se levanta la estatua pedestre del Generalísimo Sebastián Francisco de Miranda, de 2.70 metros de altura. El Precursor de la Independencia luce uniforme militar, casaca cerrada al frente, par de charreteras de palas y canelones; pechera y bocamanga ornamentada con hojas de laurel. Cinturón de espada, pantalones y botas altas que cubren hasta la rodilla. Con la mano derecha –extendida hacia el frente- sostiene un asta de cuatro metros de alto en la que ondea la Bandera Nacional, y en la izquierda, la espada de General en Jefe.
Valores patrimoniales
La Nacionalidad, anclado en la Sierra Nevada de Mérida, es el monumento a mayor altura del mundo consagrado a la memoria del Generalísimo Francisco de Miranda, “infatigable soñador de Colombia y caballero andante de la Libertad”. Con este también se tributa a los símbolos patrios de Venezuela.
Según Jesús Rondón Nucete, dicho monumento tenía un doble propósito: por una parte, se honraba a los símbolos de la Patria, al exaltarlos en lo más alto de las montañas andinas, “hasta donde no llegan sino los más osados, para recordar a todos que la nacionalidad tiene un elevado valor y que no es producto de un momento, sino obra de un esfuerzo continuo y constante y a veces duro de varios siglos”. Por otra parte, el monumento constituía un nuevo atractivo turístico emplazado en las Sierras Nevadas en la que se tributaba preclaro reconocimiento al Precursor de la Independencia sudamericana. En la actualidad, el espolón Miranda y el monumento a La Nacionalidad conforman unos de los hitos turísticos del andinismo venezolano, ampliamente visitado.
Situación actual
El monumento a La Nacionalidad se encuentra en regular estado de conservación. La estatua del Generalísimo Francisco de Miranda requiere ser sometida a un proceso de restauración. Actualmente el tricolor nacional ya no flamea permanente en el asta que sostiene el Precursor de la Independencia.
Ubicación
Espolón Miranda, a unos 4 800 m s. n. m., cerca de la estación Pico Espejo. Sierra Nevada de Mérida. Parque Nacional Sierra Nevada. Municipio Libertador, estado Mérida, Venezuela.
Fuentes consultadas
Chalbaud Zerpa, Carlos. Monumento a la Bandera. En Frontera, p. 10. Mérida, 11 de febrero de 1982.
Chalbaud Zerpa, Carlos. La Sierra Nevada de Mérida. Ediciones del Rectorado de la Universidad de Los Andes, Mérida, 1994, 509 pp.
Flores, Manuel. Develado monumento de Francisco de Miranda. En Frontera, p. 1. Mérida, 12 de marzo de 1984.
Flores, Manuel. Develado el monumento más grande dedicado a Miranda. En Frontera, p. 2. Mérida, 12 de marzo de 1984.
Estatua de Miranda fue colocada en la Sierra Nevada. En El Nacional, s/p. Caracas, 2 de abril de 1984.
Estatua de Miranda en la Sierra Nevada. En El Vigilante, pp. 1 y 8. Mérida, 25 de noviembre de 1982.
Estatua de Miranda en la cumbre de su nombre. En Frontera, p. 18. Mérida, 24 de febrero de 1984.
Estatua de Miranda espera que cesen las nevadas. En Frontera, p. 15. Mérida, 18 de julio de 1983.
Francisco de Miranda en honor a las alturas merideñas. En Frontera, p. 2A. Mérida, 15 de abril de 1992.
Personas ligadas al turismo y al andinismo serán condecoradas. En Frontera, p. 14. Mérida, 8 de marzo de 1984.
Rondón Nucete, Jesús. El monumento a la Nacionalidad. En Frontera, p. 4. Mérida, 28 de marzo de 1984.
Solarte, Adelfo. Miranda tiene en Mérida su espacio de desagravio. En Frontera, p. 2A. Mérida, 24 de junio de 1993.
Se funde en bronce estatua de Miranda. En Frontera, p. 17. Mérida, 9 de abril de 1983.
V Jornada patriótica. En Frontera, p. 6B. Mérida, 12 de octubre de 1999.
Investigación: Samuel Leonardo Hurtado Camargo, historiador / @hurtadosamuel.
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