
Durante el mes de diciembre estuvimos realizando una serie de recorridos por iglesias, capillas, plazas y parques de la ciudad, además de otros sitios públicos, en los que hemos podido constatar la continuidad de una serie de tradiciones como lo son las tempraneras Misas de Aguinaldos, los Nacimientos o Pesebres colocados en espacios públicos y privados, y la iluminación de plazas, parques y vías públicas, para el disfrute de los visitantes.
Las Misas de Aguinaldos dan inicio en la segunda quincena del mes, desde el 16 hasta el 24 de diciembre, para celebrar durante nueve días -según algunas fuentes,- la peregrinación que realizaran José y María para el empadronamiento en el pueblo de Belén; según otras, los nueve meses de gestación previos a la llegada del Niño Jesús.
Estos rituales litúrgicos se originan en la colonia, por ejemplo, «en 1587, fray Diego de Soria, superior del convento de San Agustín de Acolman (hoy Estado de México) tuvo permiso del papa Sixto V para celebrar unas “misas de aguinaldos”, entre el 16 y 24 de diciembre, en las que se incorporarán pasajes de la navidad. Son las llamadas fiestas de “Las posadas”» (1). Según Manuel Felipe Rugeles, la gracia otorgada por el Papa Sixto V el 5 de agosto de 1585, se extendía a todo este hemisferio (América). Para María García de Fleury, fue una concesión realizada en 1888, por el papa León XIII, a las Filipinas, las Islas Canarias, Puerto Rico y Venezuela, para que pudieran ser incluidos cantos de parrandas y aguinaldos en las misas previas a la Natividad.
Las Misas de Aguinaldos se celebran en la madrugada, desde las 4 – 5 am, o en la mañana entre las 6 y las 7 am. Esto se debe al precepto litúrgico denominado “ayuno eucarístico” que implicaba que luego de la medianoche y hasta el momento de la comunión, no se debía ingerir alimentos. Asimismo se celebraban tempranamente para que los trabajadores del campo y los que debían salir del poblado a lugares alejados, asistieran antes de dedicarse a sus faenas. También por ello se inició la tradición de compartir algunos alimentos calientes al finalizar la misa, como arepitas dulces y chocolate caliente.


En Caracas pudimos asistir a las misas en Nuestra Señora del Pilar del Municipio Baruta y Nuestra Señora de la Candelaria y Nuestra Señora del Rosario de Antímano, en el Municipio Libertador. En ellas se apreciaron los coros de niños, jóvenes y adultos que, acompañados de los instrumentos tradicionales (cuatro, tambor y furro), entonaban aguinaldos como “Niño Lindo” (cuya autoría difiere según las fuentes: anónimo, de Vicente Emilio Sojo o de Hugo Liscano y Javier Galué), “Mi Burrito Sabanero” (Hugo Blanco), “Preparen la mesa” (anónimo), “El Niño Jesús llanero” (Simón Díaz) o “Tuntún, quién es” (Recopilación de Vicente Emilio Sojo), entre otros.
Los Nacimientos o Pesebres representan otra tradición que se remonta a la colonia y fue traída por los padres franciscanos. Del ámbito religioso pasó a convertirse en práctica común en los hogares, por ello en las iglesias encontramos hermosas imágenes que rememoran la Natividad de Jesús y los hechos que lo rodearon: la anunciación del ángel a los pastores, la estrella que se posó sobre el portal de Belén y la epifanía.
La tradición arraigó con mucha fuerza en los estados andinos, pero se propagó por toda la provincia. El Cónsul y encargado de negocios de Gran Bretaña en La Guaira y Caracas, Sir Robert Ker Porter, reseñó en sus memorias «Diario de un diplomático británico en Venezuela. 1825-1842», la visita que realizara a la casa de un coronel retirado, en 1828 y en donde observó “un nacimiento vivo”, representación de la Natividad con «una colección de juguetitos alemanes que, movidos por un canalito de agua corriente en una habitación separada: soldados, molinos de viento, lavanderas, monstruos con cabezotas, patos, pelícanos y bestias salvajes, activan sus mecanismos de llamada y sobrevivencia. Casas e iglesias de cartón cubren aquí y allá la tarima de madera de este ejemplo de disparate e infantilismo humanos a edad avanzada. En una construcción de papel hay una representación hecha con muñecas, de la Virgen, el Salvador y los Reyes Magos, y colgados de clavitos en la puerta hay 4 o 5 ángeles con camisones rosados de seda y sandalias, cada uno de ellos equipado con un instrumento musical, desde el cello a los címbalos y el bombo» (2).
El recorrido nos llevó a admirar los pesebres de las iglesias de San Francisco, Nuestra Señora del Pilar, Nuestra Señora de la Candelaria y la Capilla de La Resurrección del Señor en el Cementerio del Este, además de los que tradicionalmente son colocados del lado derecho del paseo Los Próceres, en la Plaza Altamira, en la sede de la Guardia Nacional frente a la plaza Madariaga, en el Hospital San Juan de Dios, en el Teatro Teresa Carreño y en el Centro Comercial Santa Fe, de esta manera observamos su presencia en distintos espacios de diversa índole.









La decoración e iluminación de plazas, parques y vías públicas es una práctica foránea que poco a poco se ha ido estableciendo y actualmente las alcaldías pareciera que compitieran en la decoración de mayor número de espacios, para el beneplácito de los vecinos y visitantes.
La iluminación de exteriores comenzó tímidamente en los Estados Unidos, a principios del siglo XX -tras la invención de la electricidad, la bombilla eléctrica y las luces para el arbolito por la Edison Electric Light Company-, cuando algunas tiendas comenzaron a adornar sus escaparates. A partir de 1920, se iluminaban árboles navideños con guirnaldas de bombillos de colores, en centros comunitarios y espacios públicos en Nueva York y Philadelphia. A partir de la década del 50 del siglo pasado, se extendió esta práctica y de allí, pasó a otros países.
En Caracas la tradición del encendido de una cruz para inaugurar la Navidad, se inició el 1ero de diciembre de 1963 en el Hotel Humboldt. “En 1966 se instaló la cruz en la antena del canal Venezolana de Televisión, ubicada en el sector de Los Mecedores. Casi una veintena de años más tarde, en 1982, se construye la mole de hierro que hasta hoy ilumina las navidades capitalinas, desde el sector Papelón” (3).
Memorables decoraciones navideñas han sido el San Nicolás en su trineo del Centro Comercial Ciudad Tamanaco, encendido por primera vez el 15 de noviembre de 1978; las coronas y campanas del Municipio Chacao en la década del 90; el San Nicolás inflable de la Torre Banesco (El Rosal); el río de luces que alumbró el Guaire en 2006, un proyecto de la Alcaldía de Baruta conjuntamente con bolívar Banco; el Gran Paseo de la Navidad de la Alcaldía de Caracas en 2014 desde la Plaza de El Viento pasando a lo largo de la avenida Bolívar hasta llegar a la Plaza O’Leary, entre otros.








En su ensayo “Mensaje sin destino” (1942), Mario Briceño Iragorry advertía la franca transculturación en nuestras costumbres, señalando que si “Simón Bolívar reapareciera en noche de navidad en la alegre Caracas donde discurrió su infancia, en el sitio del antiguo pesebre con el paso del nacimiento, que arreglaba con devota diligencia Doña María Concepción, encontraría un exótico «Christmas Tree», cubierto de simulada nieve, y en vez del estoraque, el mastranto, la pascuita y los helechos que daban fragancia campesina a la recámara, hallaría verdes coronas de fingido agrifolio y gajos de muérdago extranjero” (4), Sin embargo, se ha producido más bien un sincretismo cultural y una mezcla de tradiciones propias e importadas, coexistiendo las de vieja data, provenientes de la Colonia (pesebres, hallacas, misas de villancicos y aguinaldos), con las que se han ido gestando en este terruño (ponche crema, pan de jamón, gaitas marabinas) y las que han venido de otras latitudes, traídas por la industria del entretenimiento (el ballet Cascanueces, el arbolito navideño, el encendido de luces).
Lo común es que den inicio en noviembre y finalicen, para unos, el día de Reyes; para otros, con la Paradura del Niño; y para algunos más, el 2 de febrero, día de la Candelaria.
Herminia Gutiérrez
Fuentes Consultadas
01 de Diciembre de 1982, Se Enciende por Primera Vez la Nueva Cruz del Ávila. En Efemérides Venezolanas, 1 de diciembre de 2020. Consultado el 6 de enero de 2023 (3)
Acosta, Emilio. Post en Instagram en VenezuelaProvincial, 28 de diciembre de 2023. Consultado el 29 de diciembre de 2023 (2)
El Nacimiento, una tradición que perdura en Venezuela. En IAM Venezuela, diciembre de 2016. Consultado el 29 de diciembre de 2023
Emblemático trineo de Papá Noel en el CCCT, Caracas. En Viajando En El Tiempo y Algo Más (Página de Facebook), 16 de diciembre de 2020. Consultado el 6 de enero de 2023
García, José Ramón. Un Mensaje sin destino de Mario Briceño Iragorry. En Galaxia de JR, 7 de octubre de 2009. Consultado el 6 de enero de 2023 (4)
Mason, Roberto. Las Misas de Aguinaldo: un poco de historia y su valor litúrgico. En Diócesis de San Fernando de Apure, 12 de diciembre de 2022. Consultado el 28 de diciembre de 2023
Pérez, Ramón. ¿Por qué las “Misas de aguinaldos” son un privilegio del Vaticano para Venezuela? En El Guardián Católico, 17 de diciembre de 2022. Consultado el 28 de diciembre de 2023 (1)
Ramos Flamerich, Guillermo. De cómo Vicente Emilio Sojo rescató al “Niño lindo”. En cinco8, 23 de diciembre de 2021. Consultado el 28 de diciembre de 2023
Veloz, Alberto. El pesebre, tradición familiar milenaria. En El Estímulo, 12 de diciembre de 2020. Consultado el 29 de diciembre de 2023