En octubre de 2024, se cumplieron 160 años del nacimiento del Dr. José Gregorio Hernández, “el médico de los pobres”. Aún espera el pueblo venezolano por su canonización, después de haber sido beatificado en el año 2021. Para esta reseña, IAM Venezuela visitó tres lugares emblemáticos relacionados con la vida y obra del Dr. Hernández: su pueblo natal, Isnotú, en el estado Trujillo (descrito en esta nota), la casa en donde vivió en La Pastora y el altar en donde reposan sus restos mortales, en el Santuario Nuestra Señora de La Candelaria, en Caracas (tema de un próximo artículo).
La visita a Isnotú coincidió con la fecha de su natalicio, el 26 de octubre, por lo que el pequeño pueblo se vio colmado de peregrinos provenientes de distintas ciudades del país, que venían a pagar promesa y a dar las gracias por algún favor concedido, en general, relacionados con la salud.
Es tal su devoción que no solo hay imágenes de José Gregorio Hernández en los altares de las iglesias y en espacios públicos del país, también se encuentra en los hogares venezolanos junto a la imagen de Cristo y de la Virgen.
Nombre: Día del beato José Gregorio Hernández Cisneros y misa solemne en su honor en Isnotú, Edo. Trujillo.
Fecha: 26 de octubre.
Tipo de patrimonio: Intangible / Tradiciones religiosas.
Administrador custodio o responsable: el pueblo venezolano, Diócesis de Trujillo y el gobierno regional (Estado Trujillo).
Historia
El Dr José Gregorio Hernández es el cuarto beato de Venezuela (le preceden la Madre María de San José, la Madre Candelaria de San José y la Madre Carmen Rendiles), aunque su causa fue la primera en iniciarse.
Nacido en Isnotú el 26 de octubre de 1864, siendo muy joven se trasladó a Caracas con el fin de estudiar en el Colegio Villegas y luego ingresar a la Universidad Central de Venezuela, donde se licenció en Medicina, en 1888. Volvió a Isnotú para ejercer la carrera, y desde ese mismo momento comenzó la labor altruista y caritativa que hizo que fuera llamado “el médico de los pobres». En 1889 fue trasladado a París, becado por el gobierno de Rojas Paúl, para especializarse en lo más avanzado en microbiología, patología y bacteriología, entre otras especialidades. Una vez culminados sus estudios, en 1891, retornó a Venezuela y trajo consigo equipos médicos novedosos, por instrucciones del gobierno venezolano, los cuales fueron llevados al Hospital Vargas -por esta razón se le atribuye la introducción del microscopio y la medicina científica en Venezuela, además de ser el pionero de la bacteriología en el país-. Fue director del Laboratorio Nacional, profesor de Histología Normal y Patológica, Fisiología Experimental y Bacteriología en la Universidad Central de Venezuela, director del Hospital Vargas de Caracas y fundador de la cátedra de Bacteriología, la primera en América. Fue también la primera persona en Venezuela en publicar un trabajo sobre esta disciplina. En total escribió y publicó once trabajos en el campo científico, y algunas obras literarias como “El Sr. Nicanor Guardia” (1893), “Visión de arte» (1912), “En un vagón» (1912) y “Los maitines» (1912), obras que fueron publicadas en El Cojo Ilustrado.
En 1908, ingresó en el monasterio de la orden de San Bruno en la Cartuja de Farneta, donde permaneció hasta abril de 1909, reincorporándose un mes después a sus actividades académicas. En 1917, viajó a Nueva York y Madrid para realizar estudios, quedando encargado de sus cátedras, el doctor Domingo Luciani. Retornó a Venezuela y en 1918 formó parte del equipo médico que luchó contra la epidemia de la gripe española.
Perteneció a la Orden Franciscana Seglar de Venezuela, en la fraternidad de la Merced de Caracas, en la Iglesia Nuestra Señora de la Merced de los Frailes Capuchinos, desde diciembre de 1899.
Su muerte se produjo el 29 de junio de 1919, causada por el golpe en la cabeza que recibió al caer en la acera después de ser atropellado en la esquina de Amadores, en La Pastora.
La creencia popular en su intercesión ante Dios para recuperar la salud, llevó a la Iglesia católica venezolana -liderada por el arzobispo de Caracas, mons. Lucas Guillermo Castillo- a dar inicio a su causa ante el papa Pío XII, en 1949.
En 1972, el Vaticano reconoció la vida virtuosa y ejemplar del Dr. Hernández, y el papa Pablo VI le otorgó el título de siervo de Dios. En 1975, se realizó la exhumación de sus restos mortales que fueron trasladados al baptisterio de la Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria. Comprobados los primeros casos de sanación atribuidos a su intercesión, fue declarado venerable, en 1986, por el papa Juan Pablo II.
En 2017 fue aprobado el milagro atribuido a José Gregorio Hernández: la curación de la niña Yaxury Solórzano, quien, tras recibir un disparo en la cabeza, si lograba sobrevivir tendría secuelas permanentes, según concluyeron los doctores. Ante estos pronósticos poco alentadores, la madre oró a José Gregorio Hernández por su cura, la cual se verificó rápida y totalmente. La comisión eclesiástica encargada de estudiar el caso, concluyó que se trataba de una curación milagrosa.
El 30 de abril de 2020, se realizó el acto de beatificación del doctor José Gregorio Hernández, en Caracas, y la iglesia oficializó su culto en la fecha de su natalicio, el 26 de octubre.
Se encuentra en revisión un segundo milagro entregado al Vaticano por representantes de la Iglesia católica venezolana. Un paciente grave por el colapso de órganos blandos y cuya muerte era inminente, tras ocho días de oración por parte de sus familiares, tuvo una curación que los médicos tratantes en Estados Unidos, no podían explicarse.
Actualmente la causa sigue llevada por la Arquidiócesis de Caracas, encabezada por el cardenal Baltazar Porras y el vicepostulador Gerardino Barrachini. En febrero de 2024, el cardenal expresó su deseo de que la canonización se oficialice en 2025.
Descripción
Isnotú es un pueblo del Edo. Trujillo, fundado en 1640.
Cada año se prepara para recibir a miles de peregrinos, en su mayoría provenientes de los estados aledaños (Táchira, Mérida, Zulia, Falcón, Barinas y Lara) para visitar su Santuario. Al mismo tiempo, en varios estados de Venezuela se llevaron a cabo ofrendas y misas solemnes, en celebración de este nuevo aniversario de su natalicio.
Para iniciar la celebración, a las 12 de la medianoche del 25 de octubre, se tocaron 160 campanadas en las iglesias, lo que también ocurrió en el Templo Colonial de Escuque (Santuario Diocesano del Niño Jesús de Escuque) y en Betijoque, en la iglesia de San Juan Bautista y otras iglesias de la Diócesis de Trujillo.
A las 6:00 am del 26 de octubre, inició la fiesta litúrgica con el rosario de la aurora. A las 7:00 am, comenzó la vigésimo quinta caminata en su honor, cuyo recorrido se inició desde la plaza del sector San Antonio de la ciudad de Valera y culminó en el Santuario Niño Jesús del doctor José Gregorio Hernández, en donde también dieron inicio las misas en su honor. Para las 10:00 a.m. estaba planificada la Eucaristía Solemne presidida por el obispo de Trujillo, mons. José Trinidad Fernández, en la Iglesia de Isnotú.
En donde estuvo la casa paterna que vio nacer y crecer a José Gregorio Hernández, se construyó un complejo formado por una pequeña capilla abierta con una estatua blanca del beato en su centro y en la que permanentemente se reciben los agradecimientos en forma de pequeñas medallas. Allí también reposa una placa que reconoce su labor como científico y como hombre de fe. Inmediatamente se encuentra el Santuario también blanco, de líneas geométricas y remate triangular con techo a dos aguas. Sobre este, una estructura que prolonga la calle central de la fachada, que sirve de base a una estatua blanca del Sagrado Corazón de Jesús con los brazos abiertos en actitud de recibimiento. A sus pies, en letras de metal, se lee “Venezuela a tus pies”. Destacan los imponentes vitrales en la fachada, que muestran a José Gregorio Hernández en su faceta como médico amparado por Nuestra Señora de los Remedios, Patrona de los enfermos, como científico y como ser humano piadoso. Una torre campanario de base cuadrada adosada a la iglesia, se eleva y en el fuste liso se identifica al Santuario del Niño Jesús (escrito todo en minúsculas). Al entrar al templo, se aprecia el altar sobre el cual se encuentran otro grupo de vitrales, destacando el central que muestra una escena celestial en la que José Gregorio está postrado frente a la Virgen del Carmen y rodeado de ángeles, con la inscripción: “Familia que reza unida, permanece unida”. Los techos siguen la forma del exterior.
Las festividades incluyeron la develación de una escultura hiperrealista del Beato realizada en arcilla fundamentalmente, y creada por el artista merideño Israel Linares. Además estuvo abierta al público, la exposición del Museo Diocesano Dr. José Gregorio Hernández Cisneros, con fotografías y objetos que pertenecieron a su persona y a su familia.
Valores patrimoniales
El Santuario de Isnotú (“Santuario Niño Jesús del doctor José Gregorio Hernández”) fue bendecido en 1966, como cierre del centenario de su nacimiento. Desde Caracas, el obispo auxiliar, mons. José Rincón Bonilla trajo la imagen del Niño Jesús que le había pertenecido al beato. La ceremonia de inauguración fue presidida por el cardenal José Humberto Quintero, arzobispo de Caracas.
Junto al templo se encuentra un oratorio en el lugar exacto en donde nació, el Museo Diocesano, la Plaza del Peregrino, la gruta de la Virgen de Coromoto, un salón de teatro, la casa parroquial, la posada del peregrino y la librería. El conjunto fue ideado por el obispo José León Rojas y llevado a cabo por el padre Prudencio Baños.
El Museo Diocesano Dr. José Gregorio Hernández Cisneros, tras una remodelación fue nuevamente inaugurado en 2022, por el obispo de la Diócesis de Trujillo, mons. José Trinidad Fernández. Allí se resguardan “65 piezas: 18 tridimensionales y 47 bidimensionales, formadas (sic) por pinturas, grabados, textiles, tallas, manuscritos, impresiones, productos industriales, de distintas técnicas artísticas, pictóricas, creativas, y de materiales como madera, resina, óleo, papel, creyón, tinta china, nácar, arcilla, entre otros” (1). Fundamentalmente se encuentran: una “talla del Niño Jesús que le fue regalada por los Franciscanos de Jerusalén, varias imágenes religiosas, una camándula (rosario), dos camas, dos mesitas de noche, dos escaparates, un piano con su taburete y tapiz, documentos del Colegio Villegas, diecinueve récipes médicos originales, tres cartas de su puño y letra, correspondencias recibidas por él, dos bendiciones apostólicas del Papa, una toalla de baño, una condecoración otorgada por la UCV, el último teléfono que fue de su propiedad, dos fotografías originales del día del entierro, pintura de la Virgen del Rosario que se veneraba en el antiguo templo de Isnotú conocido por el beato, escudo familiar dibujado y documentado por el beato, maderos, puertas, clavos, bisagras y ladrillos de la casa natal, foto y busto de su primer maestro” (2). Se encuentra también una colección de 14 obras del artista Iván Belsky realizadas en conmemoración del centenario de su nacimiento (1964), y otros objetos provenientes del antiguo templo de Isnotú.
La celebración en honor al beato, como manifestación de fervor popular, está contemplado como Bien de Interés Cultural, Gaceta Oficial 38234 de fecha 22 de julio de 2005.
Situación actual
La celebración aniversaria tuvo resonancia en todo el país que aguarda, con gran veneración, su pronta canonización. Actos en su honor fueron realizados en Caracas, en el Santuario Nuestra Señora de La Candelaria que resguarda sus restos mortales, y en donde se llevó en procesión su imagen, en la llamada “Ruta de la esperanza”, el día 25 de octubre. También se celebró la IV Fiesta Litúrgica a las 6:00 pm. En la Casa Museo José Gregorio Hernández en La Pastora, se inauguró la exposición “José Gregorio Hernández: Médico, Hombre y Beato de todos los tiempos”.
En Valencia, se realizó la tercera peregrinación por la salud en su honor, organizada por el Santuario Arquidiocesano José Gregorio Hernández, conjuntamente con la Pastoral de la Salud y la Arquidiócesis de Valencia. Fue llevada en procesión la imagen y una reliquia del beato, así como también se realizaron cuatro misas en su honor.
En Cúpira, se llevó a cabo la peregrinación de 25 parroquias eclesiásticas provenientes de Guarenas, Guatire y Barlovento, al Santuario Diocesano, acto que se inició a las 6:30 am y en su honor se celebró una misa solemne a las 10:30 am.
Todas estas manifestaciones religiosas y oraciones solicitando su intercesión por la salud de los habitantes de esta nación, demuestran la veneración y la fe que le profesa todo el pueblo venezolano.
Ubicación
El Santuario se encuentra en el pueblo de Isnotú que está ubicado en el municipio Rafael Rangel del estado Trujillo.
Herminia Gutiérrez
Fuentes consultadas
A 160 años del natalicio del beato venezolano. En Conapdis, 26 de octubre de 2024. Consultado el 20 de noviembre de 2024.
Álvarez, José Magdaleno. Museo doctor José Gregorio Hernández en Isnotú valiosísimo patrimonio de la región. En Diario de los Andes, 19 de mayo de 2024. Consultado el 20 de noviembre de 2024 (2).
Día del beato José Gregorio Hernández rinde honor al “médico de los pobres”. En Correo del Caroní, 26 de octubre de 2024. Consultado el 20 de noviembre de 2024.
Díaz, Jackelin. Iglesia católica reveló detalles del segundo milagro de José Gregorio Hernández. En Eldiario.com, 11 de mayo de 2024. Consultado el 20 de noviembre de 2024.
González, Gusyerlis. La hermosa experiencia de visitar Isnotú, cada rincón recuerda el legado del beato. En El Universal, 6 de mayo de 2021. Consultado el 25 de noviembre de 2024.
Sarmiento, Yorman. Venezuela celebrará los 160 años de nacimiento del Beato José Gregorio Hernández. En Televen.com, 25 de octubre de 2024. Consultado el 20 de noviembre de 2024.
Viloria, Rebeca. Isnotú es un pueblo de fe, peregrinación y hospitalidad. En Últimas Noticias, 29 de abril de 2023. Consultado el 10 de noviembre de 2024 (1).
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